Este libro pretende ser testimonio del pensamiento y la práctica, a través de una recopilación de trabajos producto de una reflexión sobre el arduo y polémico problema de la intersección entre el campo de la psiquiatría y el discurso psicoanalítico.
Son trabajos escritos y ponencias presentadas en diversos foros en los que de alguna manera el autor da cuenta de los problemas que emergen del cruce de dos discursos que desde el punto de vista de la teoría de Jacques Lacan son antagónicos: Por un lado, el discurso del amo, que es el que sostiene la práctica de la Salud Mental, en la que es la palabra del profesional la que comanda la relación con el paciente excluyendo al sujeto del inconsciente y el valor representativo de su palabra.
Por otro lado, el discurso analítico, que pone al sujeto a trabajar para que éste pueda acceder a la verdad que lo determina.
No obstante ser discursos antagónicos, el de la psiquiatría y el del psicoanálisis, no hay que olvidar que ambos conciernen al sujeto que demanda amparo y conocimiento al Otro social del orden, de la ciencia o del psicoanálisis. Otra cosa es que cada uno de ambos discursos y los profesionales que los sostienen tengan concepciones distintas del amparo que ha de suministrar al sujeto y del conocimiento que ha de favorecer en el mismo.
En definitiva, el libro trata de responder a la pregunta de lo que puede aportar el psicoanálisis al campo institucional de la Salud Mental, dándole un especial tratamiento al trabajo con psicóticos que mayoritariamente depositan su demanda en estos recursos públicos.